El pasado 29 de abril, día internacional del árbol, la Fundación Serena del Mar (FSDM) organizó la Segunda Jornada Ambiental: Al Natural en Manzanillo del Mar. En esta ocasión contamos con voluntarios de Novus Civitas, firma gestora del desarrollo urbanístico Serena del Mar, NC Agroindustriales y miembros de Manzanillo del Mar, quienes se unieron para sembrar 76 árboles frutales y empoderar a la comunidad en el cuidado de su entorno ambiental.
Para contar mejor esta experiencia, la FSDM entrevistó a dos voluntarios de Novus Civitas: Andrés Felipe Cuao Rincones, residente ambiental y Laura Inés Baiz, abogada de la compañía. Estos fueron sus comentarios. Fundación Serena del Mar: ¿Es la primera vez que participas en las jornadas de voluntariado de la FSDM?, ¿En qué otra de nuestras actividades has estado? Andrés Cuao: He participado en casi todas las actividades que realiza la fundación, entre las que recuerdo se encuentran las jornadas de sensibilización ambiental a la comunidad cercana al Caño Guayepito y la Primera Jornada Ambiental: Al Natural, en la que recolectamos basuras para limpiar Playa Rica. Laura Baiz: No, no es la primera vez que participo. También participé en noviembre de 2018, en la Primera Jornada Ambiental, bautizada “Al Natural”, la cual fue una actividad de limpieza y recolección de residuos en Playa Rica. FSDM: ¿Qué trabajos tuviste que hacer durante esta jornada? AC: Mi trabajo consistió en apoyar y explicarles a los niños de la comunidad por qué es importante realizar la siembra de árboles, en qué consistía y cómo se puede realizar de forma rápida y sencilla. LB: Yo participé en la plantación de los árboles. Luego de escuchar las instrucciones, tomamos el abono y lo arrojamos al hueco que había sido excavado previamente, lo humedecimos un poco y pusimos la planta encima, sosteniéndola con las manos y con un palo al cual la sujetamos, mientras otro integrante del equipo rellenaba el resto del agujero con más abono. Finalmente regamos la planta y así seguimos con las siguientes. FSDM: ¿Qué fue lo que más te gustó de esta experiencia? AC: Siempre es interesante trabajar con niños y la mayoría estaban bastante entusiasmados de poder sembrar un árbol, para ellos es algo nuevo y fácil de hacer. Ahora lo que viene es seguir trabajando con ellos para que puedan cuidar de sus plantas y hacerles seguimiento diario. LB: La satisfacción de trabajar para mejorar nuestro entorno, de darle algo a la madre tierra, de intentar mejorar el futuro de las próximas generaciones. La satisfacción del trabajo en equipo con mis compañeros y con los niños de la comunidad, niños proactivos que desde ya muestran un compromiso con su comunidad y con el medio ambiente. En esta actividad nos encontramos con niños que ya habían participado en la Primera Jornada Al Natural, lo cual nos da un parte de esperanza en cuanto al compromiso medioambiental de las futuras generaciones. FSDM: Describe brevemente ¿qué se necesita y cuáles son los pasos para sembrar un árbol? AC: Si se tiene la planta ya en una bolsa lista para sembrar, se debe hacer lo siguiente: realizar un hueco de 20 centímetros de ancho por 30 centímetros de profundidad donde se sembrará la planta. Mientras se va plantando, se adiciona un poco de agua y abono hasta que la planta quede totalmente fija. Posteriormente, se pone una guía (que es un palo para que la planta no se caiga), el cual se le amarra al tallo. Se continua con el riego de agua y se adiciona un poco más de tierra y abono. Para cuidar la planta, se colocan una barrera física para evitar que la dañen agentes externos como animales o personas. FSDM: ¿Te relacionaste con la comunidad de Manzanillo durante esta jornada?, ¿Cuéntanos alguna experiencia? AC: Como debía cuidar niños, tuve la oportunidad de relacionarme con las profesoras de Manzanillo y realizar juegos para entretener a los niños mientras empezaba la actividad. Considero que este es un espacio muy importante de integración comunitaria y, sobre todo, permiten impulsar iniciativas que contribuyen al cuidado de nuestro ambiente. LB: Claro que sí, como lo mencioné antes, de las situaciones más bellas y gratificantes que viví fue ver involucrados a niños de la comunidad realmente comprometidos con la actividad. Podía verse en sus caras las ganas de colaborar e interactuar con nuestro equipo de voluntarios. FSDM: ¿Qué opinas de la gestión de la Fundación Serena del Mar en la zona norte de Cartagena? AC: Como siempre la gestión de la fundación es muy buena, y este tipo de acciones hace que se resalte mucho más el compromiso ambiental que existe. LB: Maravillosa. Me siento orgullosa de la fundación, de ver el trabajo tan importante en la comunidad, especialmente con los niños y cómo realmente se ve impactado el presente de los emprendedores y el futuro de pequeños y adolescentes. Me encanta llegar a la sede de la fundación y ver las actividades que diariamente realizan y que mejorarán la calidad de vida de las comunidades de la zona norte y de Cartagena misma. FSDM: ¿Participarías en otra Jornada Al Natural?, ¿Qué te gustaría que hiciéramos en una próxima oportunidad? LB: Claro que sí. Estas actividades son una manera de reivindicarnos con la tierra, con nuestro prójimo, con la vida misma. Nos permite entregar y aportar un granito de arena al futuro y al mejoramiento de nuestro entorno. Todo cambio empieza por uno mismo, por el compromiso personal de cada uno… Como decía Gandhi “Debes ser el cambio que deseas ver en el mundo”. Para futuras oportunidades me gustaría que la fundación programara una actividad de cine para los niños de la comunidad.
0 Comentarios
Quince miembros de las comunidades de Manzanillo del Mar, Tierra Baja y Villa Gloria participaron recientemente en la jornada concientización, reciclaje y aprovechamiento del plástico “Cero Contaminación Plástica, Cero Pobreza”, organizada por Yunus&You Colombia, Grameen Creative Lab e Impact Hub, y apoyada por la Fundación Serena del Mar, la Fundación Bahía y Ecosistemas de Colombia, Plástico Infinito, la Universidad Autónoma de Nariño y la Casa Museo y Arte La Presentación.
Los objetivos de esta iniciativa son generar conciencia sobre las graves consecuencias medioambientales que está generando la inadecuada disposición de residuos, especialmente de los plásticos, y entender las opciones de aprovechamiento que se les pueden dar a estos. Para Kerlis Miranda, habitante de Villa Gloria, este tipo de actividades fortalecen la gestión ambiental en las comunidades: “Tuvimos la oportunidad de ver cómo otras comunidades separan apropiadamente los residuos y los reciclan. Debemos replicar este modelo en las nuestras e involucrar en la labor a niños, jóvenes y adultos”. La jornada comenzó con una capacitación sobre la separación de residuos desde la fuente y los sistemas comunitarios de recolección. Posteriormente, se llevó a cabo el taller “El Plástico como Negocio Social”, en donde los asistentes dialogaron sobre el aprovechamiento del plástico, un proceso que implica clasificación, limpieza, trituración e inyección, hasta obtener elementos útiles como llaveros, piezas artísticas y decorativas, baldosas y recipientes, a partir del plástico reutilizado. A propósito de este tema ¿sabes cuál es la diferencia entre residuos y basuras? Los primeros son aquellos que sobran luego de realizar una actividad y que pueden ser reutilizados. Las basuras, por el contrario, no tienen un segundo uso. Pero ¿por qué es importante el reciclaje?, a continuación te contamos cinco de sus beneficios:
Nos vinculamos a la Semana de la Sostenibilidad Ciclo Siete y vivimos siete días de experiencias que promueven las buenas prácticas sociales y ambientales en las comunidades. En esta oportunidad se vincularon en la maratón niños, niñas y jóvenes de las comunidades por la protección del ambiente. Esto fue lo que hicimos:
Desde ahora los habitantes de Tierra Baja podrán asistir a su nuevo templo religioso para manifestar su fe y celebrar la convivencia e integración comunitaria. En 2018, la Fundación Serena del Mar y el desarrollo urbanístico Serena del Mar entregaron al Consejo Comunitario de Tierra Baja 200 millones de pesos y los planos arquitectónicos para la construcción de la obra que ya es una realidad. Después de nueves meses de arduo trabajo y gran compromiso de parte de la comunidad, hoy Tierra Baja cuenta con un templo que servirá para congregar a las familias y fortalecer las tradiciones religiosas y culturales de los tierrabajeros.
Este espacio cuenta con capacidad para que 100 personas rindan culto a sus creencias y tradiciones y fomenten la identidad de Tierra Baja. La Fundación Serena del Mar seguirá aportando al Consejo Comunitario en la búsqueda de alianzas que permitan embellecer progresivamente el recinto religioso. Lo hicieron durante el “Painting Together” una iniciativa liderada por la Fundación Cojowa y la Fundación Serena del Mar Familias del Colegio Jorge Washington, estudiantes y docentes de Manzanillo del Mar y el equipo de la Fundación Serena del Mar se reunieron para pintar la Institución Educativa de Manzanillo del Mar, en el marco del “Painting Together” una iniciativa liderada por la Fundación Cojowa y la Fundación Serena del Mar.
A la jornada de voluntariado asistieron más de 400 niñas, niños, jóvenes y adultos, quienes emplearon 169 galones de pintura en la renovación de la entrada del colegio, pasillos, escaleras, barandas, cafetería, cancha deportiva y 7 salones de clase, mejorando así la infraestructura educativa al servicio de 368 estudiantes de prescolar a bachillerato. Durante el “Painting Together” también se puso la primera piedra de una nueva aula de clases de 56 metros cuadrados, que se prevé esté lista en los próximos tres meses y cuya financiación proviene en su mayoría de la Cojowa Cosmic Run, competencia deportiva realizada en 2018. La construcción del salón responde a una de las necesidades más apremiantes de la institución, ampliar su infraestructura para mejorar las condiciones de estudio de decenas de alumnos, quienes han tenido que ocupar espacios como la cafetería, debido a las limitaciones de espacio para clases. “Este tipo de actividades son muy importante para la comunidad estudiantil de Manzanillo del Mar, porque fortalecemos nuestra alianza con las organizaciones privadas que nos apoyan, logramos un mejor ambiente de aprendizaje para estudiantes y docentes, y aportamos al rendimiento de los alumnos, pues sabemos que la infraestructura educativa influye en la formación académica”, sostuvo Daniel Pupo Beltrán, rector de la I.E. de Manzanillo del Mar. Por su parte, Nick Glab, rector del Colegio Jorge Washigton sostuvo que, a través de su Fundación, el Cojowa está 100% enfocado en continuar sumando esfuerzos para mejorar la calidad educativa en Manzanillo del Mar. “Esto lo hacemos de la mano de aliados como la Fundación Serena del Mar y desde distintas iniciativas, como los talleres de lectoescritura con estudiantes de primaria, la preparación de jóvenes paras las pruebas ICFES, la entrega de becas anuales para estudios superiores y el rescate cultural por medio de la danza y el dibujo”, agregó el vocero. Finalmente, Isabel Mathieu, directora social de la Fundación Serena del Mar destacó el compromiso de la organización con los estudiantes de la zona norte de Cartagena: “estamos trabajando en la construcción de tejido social, estrechando vínculos comunitarios y pintando nuevas oportunidades de educación que se transformarán en desarrollo para todos; una visión profundamente relacionada con el quehacer de nuestra Fundación y del desarrollo urbanístico de Serena del Mar”. Fuente: https://caracol.com.co/ |